WindEurope lanza «Impacto Local, Liderazgo Global», una nueva serie de medidas que proyectan los beneficios de la energía eólica. Con el futuro de las energías renovables en Europa en juego con la negociación de las energías limpias, ahora es un momento clave para mostrar a los creadores de políticas energéticas los beneficios para la economía local que supone una mayor ambición en este sentido.
A nivel macroeconómico, la energía eólica supone una contribución de 36 billones de euros, 263.000 trabajos y una ganancia de 8 billones de euros en exportaciones, pero hasta ahora, los beneficios de la microeconomía local no eran muy conocidos. ¿Dónde están los trabajos? ¿Dónde están las fábricas de turbinas? ¿Dónde está el resto de la cadena de suministro? ¿Cómo se benefician las comunidades y concilios locales con la propiedad de parques eólicos?
Las nuevas herramientas
Las soluciones de «Impacto Local, Liderazgo Global» de WindEurope tienen la respuesta a estas preguntas. Estas comprenden un mapa de la cadena de suministro, un compendio de casos de éxito locales y hojas informativas de países. Muestra como la cadena de suministro de aire es beneficiosa para muchas regiones a lo largo de Europa, incluso en las menos avanzadas económicamente.
Asimismo, en ellas se expone como los ciudadanos se benefician de la propiedad compartida de plantas eólicas y como éstas están contribuyendo a la economía través de los impuestos que aportan al gobierno local, cubriendo un 20% de los ingresos municipales.
La industria eólica ha generado trabajo e inversión en numerosas regiones que históricamente han dependido de la industria tradicional. Áreas de industria naval como, por ejemplo, el norte de España o de Polonia ahora crean torres, bases, grúas, buques y embarcaciones que instalan turbinas en alta mar. Asimismo, el fabricante alemán de turbinas Senvion ahora fabrica aspas en Silesia y regiones con industrias químicas y del acero tienen beneficios también, gracias a su wpapel en las cadenas de suministro de la energía eólica.