Un nuevo informe de la Agencia Internacional de la Energía (IEA, por sus siglas en inglés) revela que la inversión global en energía se recuperará en casi un 10% en 2021, a 1,9 billones de dólares, revirtiendo la mayor parte de la caída de 2020 registrada por la pandemia de la COVID-19. Sin embargo, también indica que se continúa estando lejos de una trayectoria neta cero y que el gasto en transiciones de energía limpia deberá acelerarse para cumplir los objetivos climáticos.
Bajo el título ‘World Energy Investment 2021’, el documento destaca que 2021 está en camino de ser el sexto año consecutivo en el que la inversión en el sector eléctrico supera al del suministro de petróleo y gas. Se prevé que la inversión mundial en el sector energético aumente alrededor de un 5% en 2021 a más de 820.000 millones de dólares, su nivel más alto hasta la fecha, después de mantenerse estable en 2020.
Según la IEA, las energías renovables dominan la inversión en nueva capacidad de generación de energía y se espera que representen el 70% del total de este año. No obstante, el informe indica que, si bien las renovables dominan las nuevas inversiones en energía y las aprobaciones para las plantas de carbón están un 80% por debajo de lo que estaban hace cinco años, el carbón no está fuera de escena. Incluso se registró un ligero aumento en los avances para las plantas de carbón en 2020, impulsado por China y otras economías asiáticas.
El informe destaca que se espera que la inversión en petróleo y gas aumente en aproximadamente un 10% en 2021 a medida que las empresas se recuperen financieramente del impacto de 2020, pero su gasto se mantiene muy por debajo de los niveles anteriores a la crisis.
Aumento del gasto en energías renovables y redes eléctricas
El informe ‘World Energy Investment 2021’ muestra que la influencia de los paquetes de recuperación, y de las nuevas medidas de política climática, se manifiesta en las expectativas de aumento del gasto en 2021 en energías renovables, redes eléctricas, eficiencia energética -especialmente en el sector de la construcción en Europa- y tecnologías emergentes como la captura, utilización y almacenamiento de carbono e hidrógeno.
Los mercados financieros también están proporcionando señales alentadoras para la inversión en energía limpia, según el documento. La emisión de deuda sostenible alcanzó un nivel récord en 2020, y las empresas de energías renovables han superado a las empresas de combustibles fósiles en los mercados de valores internacionales. A pesar de que el gasto en energía limpia aumentará en 2021 en alrededor de un 7%, el informe señala que el crecimiento de estos gastos de capital se ha retrasado en los cambios en los mercados financieros.
“Los 750.000 millones de dólares que se prevé gastar en tecnologías de energía limpia y eficiencia en 2021 son alentadores”, destaca la Agencia Internacional de la Energía, «pero siguen estando muy por debajo de lo que se requiere para poner el sistema energético en un camino sostenible». La IEA indica que la inversión en energía limpia debería triplicarse en esta década para poner al mundo en el camino de alcanzar las emisiones netas cero para 2050.