La Comisión Europea ha publicado un nuevo paquete informativo de Cordis titulado ‘Clean energy transition to REPower the EU‘ (Transición de energía limpia hacia REPower EU). La publicación aborda 33 proyectos, financiados por la Unión Europea y gestionados por la Agencia Ejecutiva Europea de Clima, Infraestructura y Medio Ambiente (CINEA). Estos proyectos están trabajando para crear infraestructura de redes eléctricas inteligentes, electrificar el sector de la movilidad, descarbonizar la industria, cambiar el comportamiento de los consumidores, innovar en nuevas formas de producir energía renovable, así como para rehabilitar edificios.
La nueva publicación destaca cómo iniciativas de diferentes países, sectores y programas de financiación, trabajan hacia el mismo objetivo compartido: avanzar en la transición a la energía limpia en Europa.
Publicados por Cordis, el Servicio de Información Comunitario sobre Investigación y Desarrollo de la Comisión Europea, los Synergy Info Packs destacan las sinergias entre proyectos financiados en el marco de varios programas de financiación de la UE.
Redes eléctricas inteligentes
Aunque los proyectos provienen de diferentes programas de financiación, países y sectores, todos comparten el compromiso de avanzar en la transición a la energía limpia en Europa.
El capítulo ‘Expansión de las redes eléctricas inteligentes’ analiza cómo los proyectos ACON, Danube InGrid y EVVE están trabajando para incorporar funcionalidad avanzada a las redes eléctricas del futuro. Además, las nuevas tecnologías también están detrás de la rápida adopción de vehículos eléctricos en la UE.
A su vez, el nuevo Synergy Info Pack cubre las numerosas tecnologías que impulsan la transición a la energía limpia. Esto incluye los biocombustibles sostenibles que está desarrollando el proyecto BioSFerA y las soluciones fotovoltaicas innovadoras procedentes de los proyectos BIPVBOOST y LIFE BIPV, los tres destacados en el capítulo ‘Desarrollo de energía verde de próxima generación’.
También se abordan proyectos para acelerar la descarbonización de la industria, para la renovación del parque inmobiliario de Europa, para promover cambios en el comportamiento del consumidor y para hacer más ecológico el sector del transporte.