La Universidad CEU Cardenal Herrera (CEU UCH) de Valencia lidera el proyecto Quantwin, una iniciativa pionera que utiliza gemelos digitales híbridos, combinando computación clásica y cuántica, para optimizar el rendimiento y la durabilidad de las palas de aerogeneradores. El proyecto forma parte del Plan de Comunicación Cuántica de la Comunidad Valenciana, en el que participan cuatro universidades valencianas.

La erosión provocada por la lluvia es uno de los principales desafíos del sector eólico, reduciendo la eficiencia aerodinámica y acortando la vida útil de las palas. Hasta ahora, las soluciones disponibles eran poco precisas y costosas, basadas principalmente en ensayos experimentales. Quantwin permite simular con mayor fidelidad la evolución del daño, incorporando las propiedades viscoelásticas y multicapa de los materiales, y ofreciendo un modelo predictivo más robusto y preciso.
Para los investigadores, el objetivo es acercar la computación cuántica a los retos reales de la industria. Además, gracias a esta tecnología pueden simular con mucha más precisión procesos que antes resultaban demasiado complejos o costosos de reproducir.
El desarrollo de este gemelo digital híbrido permitirá anticipar la relación entre el deterioro de las palas y la pérdida de rendimiento de los aerogeneradores, facilitando la toma de decisiones estratégicas en diseño, operación y mantenimiento. Además, la metodología de Quantwin podría aplicarse a otros sectores industriales donde la predicción de daños sea clave para mejorar eficiencia y sostenibilidad.
Investigación cuántica con sello valenciano
Quantwin forma parte de los once proyectos integrados en el Plan de Comunicación Cuántica, impulsado por la Universidad Politécnica de Valencia (UPV), la Universidad de Valencia (UV), la Universidad de Alicante (UA) y la CEU-UCH. Estas iniciativas buscan consolidar la Comunidad Valenciana como referente en innovación tecnológica, desarrollando aplicaciones estratégicas en telecomunicaciones, ciberseguridad y energías renovables.
El Plan Valenciano de Comunicación Cuántica, con un presupuesto total de 76 millones de euros, se enmarca en el Plan de Resiliencia de la UE. La financiación en la Comunidad Valenciana proviene en un 65% del Ministerio de Ciencia e Innovación y Universidades y un 35% de la Conselleria de Educación, Cultura, Universidades y Empleo, impulsando la investigación y el desarrollo en computación y comunicaciones cuánticas.