DISA ha iniciado las obras para la construcción de dos parques eólicos, denominados Vera de Abote y Bermejo, que suman una potencia de 23,1 MW de energía eléctrica. Esta instalación está situada en el municipio de Arico, en Tenerife, próxima a la planta fotovoltaica de El Bailadero, propiedad del Grupo DISA.
Se trata de los primeros parques eólicos promovidos por DISA en su estrategia para la diversificación de las fuentes energéticas en Canarias. La compañía cuenta ya en producción con 14 MW de potencia fotovoltaica. La suma de la energía fotovoltaica que genera DISA y la que producirá con estos dos parques eólicos supera los 37,1 MW, cantidad suficiente para cubrir la demanda eléctrica de un municipio como La Laguna (153.000 habitantes).
La instalación cuenta con 11 aerogeneradores de 2,1 MW de potencia cada uno, con una altura total de 137 metros. La obra tiene prevista una duración de año y medio, lo que supone que esta instalación de generación eléctrica estará vertiendo a la red en el mes de diciembre de 2018.
Ejecución de la obra
La ejecución de esta obra requiere la adaptación de los accesos y viales hasta el terreno por la dimensión de los elementos que componen los aerogeneradores. Después, se procede a la cimentación de cada uno de los 11 soportes antes del montaje de los aerogeneradores. En paralelo, se irá construyendo la subestación y las infraestructuras que los parques eólicos requieren para evacuar la electricidad generada a la red de transporte del sistema eléctrico de Tenerife.
El consejero delegado de DISA Renovables, Santiago Rull, presentó estos detalles técnicos en rueda de prensa. “DISA Renovables se constituyó hace 10 años con el objetivo de hacer partícipe a esta compañía canaria, líder en el sector energético de las islas, en el proceso de diversificación de las fuentes de energía”, explicó. Rull destacó “el esfuerzo y el rigor” con el que DISA ha venido trabajando estos años con el claro propósito de contribuir a que Canarias participe en el cumplimiento de los objetivos medioambientales adoptados en las Cumbres Internacionales contra el Cambio Climático, y que pasan por lograr para el año 2030 un 40% de reducción de emisiones de gases efecto invernadero, un 27% de penetración de las energías renovables y un 27% de ahorro energético por mejoras en la eficiencia y uso racional de la misma.