La Agencia Internacional de Energías Renovables (Irena) ha publicado la serie completa de 30 Informes de Innovación bajo su guía ‘Innovation Landscape for a renewable-powered future’ (Panorama de la innovación para un futuro impulsado por energías renovables). Se trata de un análisis sobre las prioridades de innovación que los responsables políticos deberían abordar para lograr la descarbonización del sistema eléctrico con energías renovables e impulsar soluciones en este ámbito para la recuperación en el contexto generado por el COVID-19.
En la actualidad, las energías renovables representan un tercio de la generación total a nivel global, con un crecimiento notable en energías renovables variables (VRE por sus siglas en inglés). Sin embargo, para lograr los objetivos climáticos del Acuerdo de París, deberían alcanzarse dos tercios para 2050, por lo que la proporción de electricidad consumida en sectores de uso final como la industria, el transporte y los edificios, tendría que aumentar casi un 50% a mediados de siglo. Por su parte, la generación eólica y solar deberían incrementarse hasta un 60%.
El documento ‘Panorama de la innovación para un futuro impulsado por energía renovable’ proporciona un conjunto de herramientas con soluciones para los responsables políticos y una guía sobre cómo aplicarlas de forma coherente. Los Informes de Innovación dan una idea sobre cómo las innovaciones individuales aumentan la flexibilidad en el sistema, con base en las últimas y más avanzadas experiencias piloto de países de todo el mundo.
Innovación en cuatro dimensiones clave
La serie completa de informes de Irena analiza las innovaciones en las cuatro dimensiones del sistema energético. En primer lugar, las tecnologías habilitadoras, que desempeñan un papel clave para facilitar la integración de energías renovables.
La segunda dimensión hace referencia a los modelos de negocio innovadores, que ponen nuevos servicios en el mercado, mejoran la flexibilidad del sistema e incentivan una mayor integración de tecnologías de energías renovables.
En tercer lugar, el diseño del mercado. Se trata de nuevas estructuras de mercado y cambios en el marco regulatorio para impulsar la flexibilidad y los servicios de valor añadido necesarios en un sistema eléctrico basado en energías renovables, que estimulan nuevas oportunidades de negocio.
Por último, operación del sistema, formas innovadoras de operar el sistema eléctrico, lo que permite la integración de un mayor porcentaje de energías renovables variables.