La Agencia Internacional de la Energía (IEA, por sus siglas en inglés) ha publicado el Informe del mercado eléctrico 2023. El documento expone que las energías renovables dominarán el crecimiento del suministro mundial de electricidad durante los próximos tres años ya que, junto con la energía nuclear, las energías renovables satisfarán la gran mayoría del aumento de la demanda mundial hasta 2025, lo que hace improbable un incremento significativo en las emisiones de carbono del sector eléctrico. En concreto, según el nuevo informe de la IEA, se prevé que el crecimiento de la demanda mundial de electricidad se acelere en un promedio del 3% en los próximos tres años.
Se espera que más del 70% del aumento en la demanda mundial de electricidad hasta 2025 provenga de China, India y el sudeste asiático. Al mismo tiempo, las economías avanzadas buscan expandir el uso de la electricidad para desplazar los combustibles fósiles en sectores como como el transporte, la calefacción y la industria. El informe insta a que los gobiernos trabajen para permitir que las fuentes de bajas emisiones crezcan aún más rápido y reduzcan las emisiones para que el mundo pueda garantizar un suministro seguro de electricidad mientras se alcanzan los objetivos climáticos.
El Informe del mercado eléctrico 2023 ofrece un análisis de las políticas, tendencias y desarrollos del mercado recientes. También ofrece previsiones hasta 2025 sobre la demanda y el suministro de electricidad y las emisiones de CO2, con un estudio detallado de la combinación global de generación de energía en evolución.
Fuerte crecimiento de las energías renovables
El fuerte crecimiento de las energías renovables significa que se prevé que su participación en el mix global de generación de energía aumente del 29% en 2022 al 35% en 2025, con una caída de la participación de la generación a base de carbón y gas. Como resultado, la intensidad de CO2 de la generación de energía global seguirá disminuyendo en los próximos años.
No obstante, Europa se opuso a esta tendencia mundial el año pasado, donde la intensidad de CO2 de la generación de energía aumentó como resultado de un mayor uso de carbón y gas en medio de fuertes caídas en la producción tanto de la energía hidroeléctrica, debido a la sequía, como de la energía nuclear, debido al cierre y mantenimiento de plantas. Sin embargo, el informe indica que este revés será temporal, ya que se espera que las emisiones de generación de energía de Europa disminuyan alrededor de un 10% anual hasta 2025.
Según las tendencias actuales, se pronostica que la generación de energía a base de gas natural en la Unión Europea caerá en los próximos años, pero se espera que un aumento significativo en Oriente Medio compense en parte esta disminución.
El informe de este año contiene un análisis exhaustivo de los desarrollos en Europa, que enfrentó varias crisis energéticas en 2022. Los fuertes incrementos en los precios del gas natural han aumentado los precios de la electricidad en alza en algunos mercados mundiales, particularmente en Europa, lo que ha provocado un debate político sobre la reforma del diseño del mercado eléctrico, para lo que la Comisión Europea ha lanzado una consulta pública.
El aumento de los precios mayoristas de la electricidad fue más pronunciado en Europa en 2022, donde fueron, en promedio, más del doble que en 2021. El invierno 2022/2023 excepcionalmente suave hasta ahora en Europa ha ayudado a moderar los precios de la electricidad al por mayor, pero siguen siendo altos en comparación con los últimos años.
Por otro lado, es probable que las disminuciones esperadas en la generación a carbón en Europa y en las Américas se vean acompañadas por un aumento en la región de Asia y el Pacífico, a pesar de los aumentos en el despliegue de energía nuclear y el reinicio de plantas en algunos países como Japón. Esto significa, según el informe, que después de alcanzar un máximo histórico en 2022, las emisiones de dióxido de carbono (CO2) de la generación de energía mundial se mantendrán en el mismo nivel hasta 2025.
Tendencias de la demanda de electricidad en 2022
En 2022, el crecimiento de la demanda mundial de electricidad se desaceleró solo ligeramente en 2022 a pesar de los vientos en contra de la crisis energética. La demanda aumentó casi un 2% frente al 2,4% de la tasa de crecimiento media observada en el período 2015-2019. La electrificación de los sectores del transporte y la calefacción continuaron acelerándose a nivel mundial, con números récord de vehículos eléctricos y bombas de calor vendidos en 2022 que contribuyendo al crecimiento. Sin embargo, las economías de todo el mundo, en medio de la recuperación de los impactos del COVID-19, fueron golpeados por los precios récord de la energía.
Las tendencias de la demanda de electricidad variaron ampliamente según la zona. El consumo de electricidad de la India aumentó considerablemente, mientras que el crecimiento de China fue más moderado debido a su política de cero COVID. Estados Unidos registró un sólido aumento de la demanda, impulsado por la actividad económica y un mayor uso residencial tras un verano más caluroso y un invierno más frío de lo normal.
Por su parte, la demanda en la Unión Europea se contrajo debido a un clima invernal inusualmente suave y una disminución en el consumo de electricidad en el sector industrial, lo que redujo significativamente la producción debido a los altos precios de la energía y las interrupciones en el suministro causadas por la invasión rusa de Ucrania. La disminución del 3,5% en la demanda de la UE fue su segundo mayor descenso desde la crisis financiera mundial en 2009, siendo el más grande el registrado en 2020 a causa de la pandemia.
La demanda y el suministro de electricidad dependen cada vez más del clima
El nuevo informe de la IEA destaca que la demanda y el suministro de electricidad en todo el mundo dependen cada vez más del clima. Además de la sequía en Europa, se registraron olas de calor en India, lo que provocó el pico más alto en la demanda de energía del país.
Del mismo modo, las regiones central y oriental de China se vieron afectadas por olas de calor y sequías, lo que provocó un aumento de la demanda de aire acondicionado en medio de la reducción de la generación de energía hidroeléctrica en la provincia de Sichuan. Estados Unidos también experimentó severas tormentas de invierno en diciembre, lo que provocó cortes de energía masivos.
Estos fenómenos climáticos evidencian la necesidad de una descarbonización más rápida y un despliegue acelerado de tecnologías de energía limpia, subraya el informe. Al mismo tiempo, a medida que la transición a la energía limpia se acelera, el impacto de los fenómenos meteorológicos en la demanda de electricidad se intensificará debido a la mayor electrificación de la calefacción, mientras que la proporción de energías renovables dependientes del clima seguirá creciendo en el mix de generación.
En este escenario, el Informe del mercado eléctrico 2023 indica que será clave aumentar la flexibilidad de los sistemas de energía mientras se garantiza la seguridad del suministro y la resiliencia de las redes eléctricas.