El Ente Vasco de la Energía (EVE) ha publicado el informe final sobre la situación energética del 2023 en el País Vasco, que refleja un aumento de la potencia renovable instalada, en concreto, de 46 MW de nuevas instalaciones fotovoltaicas, así como una tendencia descendente en el consumo energético vasco ligado a las políticas de eficiencia energética.
Aunque el aprovechamiento de energías renovables se ha reducido debido a una menor generación hidráulica y eólica en un contexto coyuntural de menor presencia de estos recursos naturales durante el año, así como al de biomasa ligado al uso industrial, en 2023 ha destacado el crecimiento del sector de la energía solar fotovoltaica en el País Vasco, ya que aumentó su potencia instalada en 46 MW y mantiene una tendencia de crecimiento del número de instalaciones puestas en marcha en la región.
De esta manera, el informe Euskadi Energía 2023 muestra que la participación de las renovables en el mix energético regional alcanza el 8,7%, por detrás de la energía eléctrica, con un 13%. Por su parte, la participación del petróleo en el mix energético sigue siendo mayoritaria, suponiendo el 47,9% del total, mientras que el gas natural abastece el 29,7%.
Descenso del consumo energético
En línea con las políticas de eficiencia energética del País Vasco, principalmente en el sector industrial, la situación energética regional mantiene una senda de consumo descendente en la que se aprecia una reducción moderada de la demanda global de energía, al mismo tiempo que se mejora la intensidad energética. Ello se refleja en un aumento de este índice en ocho puntos por encima de lo registrado en el año anterior.
En términos generales, la demanda energética del País Vasco disminuyó más de un 10%. El gas natural es la energía que mayor descenso experimentó, debido principalmente a la baja generación de electricidad de los ciclos combinados de la región vasca a causa de la situación de mercado del sistema eléctrico estatal, así como por un menor consumo de la cogeneración.
En cuanto al consumo final, la participación renovable alcanza un 20,4%. Aunque todas las energías vieron reducido su consumo, el gas natural es la energía que más se contrajo, principalmente debido al descenso del consumo en el sector industrial vasco.
Por sectores, el sector industrial y el residencial han destacado por su mayor descenso en el consumo, con descensos del 14% y el 11%, respectivamente y, aunque limitado, también el sector del transporte registró un descenso del 2,1%. Aun así, este último sigue en cabeza como el sector de mayor consumo a nivel regional con un 47% del total, seguido de la industria (34%), el sector residencial (11%) y de los servicios (8%).
Reducción del importe de la factura energética
Por último, según el informe, el importe de la factura energética se ha reducido notablemente tras el fuerte aumento producido el año anterior.
En concreto, el coste energético para el País Vasco durante 2023 ha sido de más de 7.000 millones de euros, de los que más del 55% corresponden al transporte, el 23% a la industria, el 11% a las viviendas, el 10% a los servicios y el 1% al sector primario. Por su parte, la factura abonada por los hogares se ha reducido en un 29% respecto al año anterior.