Se ha creado un nuevo sistema de facturación para el consumo eléctrico de los acogidos a la tarifa regulada, conocida como Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor (PVPC). Estos usuarios pagarán según su consumo real, siempre y cuando cuenten con un contador inteligente y telegestionado. Las compañías de suministro eléctrico tendrán que calcular el consumo que hace el cliente cada hora de cada día, ya que el precio de la energía para el PVPC se fija en base a la cotización diaria del kilowatio-hora (kWh) en el mercado mayorista.
El continuo aumento del precio de la electricidad ha provocado que cada vez cobre una mayor importancia el coste de la facturación energética respecto de los costes totales de producción. La facturación eléctrica se ha convertido en una preocupación general de las empresas tanto en el sector industrial como en el sector servicios, especialmente de aquellas que tienen un fuerte consumo energético. De esto surge la necesidad de definir una política de gestión y control de los costes energéticos.