Fruto de la colaboración público-privada, se ha presentado el Plan España Auto 2030, que incide en el coste de los vehículos eléctricos, la infraestructura -con la red de puntos de recarga-, y la innovación y competitividad del sector, al tiempo que contribuirá a la lucha contra el cambio climático. El nuevo plan pretende servir como una hoja de ruta nacional destinada a reindustrializar el ecosistema del automóvil, fortalecer la cadena de valor y acelerar la movilidad electrificada manteniendo el empleo y la competitividad.
El Gobierno y ANFAC (Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles y Camiones) han presentado este miércoles el Plan España Auto 2030. El documento ha sido elaborado en colaboración con el Ministerio de Industria y Turismo, y con la participación del conjunto del ecosistema del sector (asociaciones, empresas, clústeres de componentes, energéticas, distribuidores, etc), las comunidades autónomas, agentes sociales y todos los actores implicados en la transformación de la industria.
El Plan articula 25 medidas prioritarias agrupadas en tres grandes ejes: industria, mercado e innovación. Estas medidas, que deberán desarrollarse a lo largo del cumplimiento del plan, aspiran a impulsar el valor añadido de la automoción en España desde los 85.000 millones de euros actuales hasta los 120.000 millones en una década.
Despliegue de infraestructura de recarga
Para contribuir a la electrificación del parque, el Plan España Auto 2030 apuesta por un Plan Nacional de despliegue de infraestructura de recarga que sea coordinado y alineado entre las Comunidades Autónomas y los agentes del ecosistema, con objetivos anuales a nivel nacional, autonómico y provincial, y reforzando competencias del Grupo de Trabajo de Infraestructura de Recarga para el Vehículo Eléctrico (GTIRVE).
De esta manera, una de las prioridades del Plan España Auto 2030 se centra en la infraestructura, apostando por incrementar los puntos de recarga.
En este sentido, durante la presentación del plan, el Gobierno ha anunciado que en 2026 se lanzará un nuevo Moves Corredores, dotado con 300 millones de euros, que contribuirá a desplegar puntos de recarga en las denominadas ‘zonas sombra’, es decir, aquellas carreteras donde aún no hay los puntos necesarios.
Asimismo, se reducirán drásticamente las licencias y permisos necesarios para instalar puntos de recarga y se ha puesto en marcha una web única de puntos de recarga. Un conjunto de medidas que, según las cifras del Gobierno, ha contribuido a que este año haya aumentado el mapa de recarga pública de más de 43 kW en más de un 50%, hasta superar los 40.000 puntos. De hecho, ya se han destinado más de 600 millones de euros para el despliegue de puntos de recarga, a través de Moves III, Moves Flotas, y Moves Singulares.
Solamente con el Plan Moves III se han subvencionado la compra de más de 170.000 vehículos electrificados (eléctricos puros e híbridos enchufables), y a ello se suma que las ventas se han duplicado en lo que va 2025 y se han financiado más de 140.000 puntos de recarga públicos y particulares.