A seis años y medio para 2030, según el Barómetro de energía 2023 de Eurelectric, Europa debe atraer inversiones sin precedentes para la expansión de la red. Para ello es necesario el desarrollo de las infraestructuras.
Según Eurelectric, el pico de la crisis energética puede que haya pasado, pero no los desafíos de la descarbonización y la seguridad del suministro de Europa.
La electrificación limpia y renovable local sigue siendo, según los expertos, la respuesta, pero se necesitan urgentemente mayores inversiones e infraestructura mejorada para permitir triplicar las tasas de electrificación para 2050.
2022, un año significativo para el sector
El Barómetro mapea desarrollos clave del sector energético basándose en investigaciones rigurosas y múltiples fuentes de datos. Según la edición de 2023 del Power Barometer, 2022 marcó un giro significativo para el sector energético de la UE y el sector mostró varias tendencias positivas.
En 2022, el consumo de gas cayó un 19% y millones de consumidores pasaron a sistemas de calefacción eléctrica. Los precios de la energía también mejoraron. Los precios mayoristas de la electricidad se han estabilizado pasando de una media de 227 euros por MW/h en 2022 a 100 euros por MW/h en 2023, seguidos por los precios minoristas.
La electrificación del transporte avanzó y las ventas de vehículos eléctricos y autobuses eléctricos alcanzaron el 21% y el 13,7% respectivamente. Sin embargo, el despliegue de la infraestructura de carga va a la zaga, al igual que las inversiones en redes eléctricas.
Según fuentes de Eurelectric, se necesitan más líneas, más digitalización y más resiliencia climática para que las redes se ajusten al nivel cero neto. Esto requiere un cambio en el enfoque regulatorio. Se debe permitir a los operadores de la red realizar inversiones anticipadas para que se pueda empezar a prepararse para una mayor electrificación.
Nueva capacidad de generación
El despliegue de nueva capacidad de generación varió mucho según la tecnología. Mientras que la energía solar fotovoltaica registró un despliegue récord de 41 GW, las instalaciones eólicas estaban rezagadas tanto en tierra como en alta mar debido a una combinación de problemas en la cadena de suministro, la lentitud en la obtención de permisos y un mal diseño de licitación.
La creciente generación eólica y solar variable requiere, según los expertos, de un aumento de tecnologías firmes y flexibles para estabilizar el sistema. Además de las plantas convencionales, las soluciones de almacenamiento deberían incrementarse enormemente. Aunque las instalaciones han aumentado hasta los 4,5 GW en 2022, se necesitarían entre 11 y 14 GW al año para satisfacer las necesidades futuras del sistema.