Las obras de la nueva línea eléctrica Tierra Estella-Muruarte de 220 kV han comenzado con un acto simbólico de colocación de la primera piedra. El nuevo eje consta de una línea de 30 km entre la nueva subestación de Tierra Estella en Oteiza y la de Muruarte, ampliada para el proyecto. Red Eléctrica invertirá 25 millones de euros en el conjunto del eje que, además de la nueva línea, incluye la nueva subestación de Tierra Estella en Oteiza y la ampliación de la subestación de Muruarte.
El acto de colocación de la primera piedra se ha celebrado este lunes en la futura subestación de Oteiza y ha contado con la presencia de la presidenta de Redeia, Beatriz Corredor; la presidenta de Navarra, María Chivite; el consejero de Industria del Gobierno Foral, Mikel Irujo; la delegada del Gobierno en Navarra, Alicia Echeverría; y el alcalde de Oteiza, Rubén Martínez Landa, entre otras autoridades.
Con una inversión de más de 25 millones de euros, se trata de un eje declarado de interés foral por el Gobierno Foral de Navarra, que da respuesta a las necesidades de compañías y asociaciones empresariales, para contar con una mayor calidad de suministro de electricidad que les permita mejorar el desarrollo de su actividad industrial.
Refuerzo del sistema eléctrico
El trazado del nuevo eje eléctrico, de 30 km entre la subestación de Tierra Estella en Oteiza y la de Muruarte, se ha definido en un proceso abierto y participativo, que se ha resuelto con la mejor solución desde el punto de vista técnico, social y medioambiental, con impacto reducido, y diseñado para cubrir las necesidades específicas del territorio.
Además, las nuevas instalaciones permitirán la evacuación de nuevos proyectos renovables, en una zona con alto potencial eólico, como destaca el Plan Energético de Navarra a 2030.
Por otro lado, la conexión de esta línea eléctrica con el nuevo eje Navarra-País Vasco de 400 kV, que Red Eléctrica tiene en proyecto, vendrá a reforzar la robustez del sistema eléctrico, potenciando la integración de energía renovable. Y también sirve de eje estratégico para la nueva interconexión eléctrica con Francia a través del Golfo de Bizkaia.