España avanza en su transición hacia la movilidad eléctrica con la colocación de la primera piedra de la gigafactoría de baterías de fosfato de hierro y litio (LFP) de Contemporary Star Energy, la joint venture de Stellantis-CATL, ubicada en Figueruelas (Zaragoza). El Gobierno de España, a través del Ministerio de Industria y Turismo, ha invertido cerca de 380 millones de euros en el proyecto mediante los PERTE del Vehículo Eléctrico y Conectado y de Descarbonización Industrial, de los cuales 270 millones se destinan específicamente a esta futura gigafactoría.
La ceremonia de colocación de la primera piedra ha reunido esta semana a autoridades y representantes institucionales, entre ellos Jorge Azcón, presidente del Gobierno de Aragón; Jordi Hereu, ministro de Industria y Turismo del Gobierno de España; y Yao Jing, embajador de la República Popular China en España, junto a directivos de Stellantis, CATL y Contemporary Star Energy.
Durante el acto se depositó una cápsula del tiempo que permanecerá sellada hasta 2045, conteniendo objetos y testimonios que reflejan la visión y el espíritu de colaboración que sustentan el proyecto.
Impacto económico y tecnológico de la gigafactoría de baterías
La gigafactoría, diseñada para operar como planta neutra en carbono, tendrá una capacidad de hasta 50 GWh, suficiente para suministrar con baterías a aproximadamente un millón de vehículos al año. La instalación aplicará tecnologías de vanguardia como el diseño Cell-to-Body, que integra las celdas directamente en la estructura del vehículo, aumentando la eficiencia y la seguridad. Además, más del 80% de su consumo energético provendrá de fuentes renovables y seguirá estándares de Industria 4.0 para garantizar procesos inteligentes y sostenibles.
Con una inversión de hasta 4.100 millones de euros, la planta generará más de 4.000 empleos directos y miles de empleos indirectos, impulsando la economía de Zaragoza, Aragón, España y Europa. Este proyecto fortalecerá la cadena de valor europea para baterías, fomentará la colaboración con universidades y centros de formación locales, y atraerá proveedores estratégicos, consolidando la región como un polo de innovación y competitividad en movilidad eléctrica.
